Una de las actividades fundamentales de diagnóstico en medicina preventiva en el trabajo dentro de cualquier organización y cumplimiento normativo elemental en la legislación colombiana referente al SG-SST está relacionado directamente con los análisis de “ausentismo”. Cuando el ausentismo se encuentra controlado y adecuadamente analizado se pueden establecer planes de acción sencillos pero muy estructurados y tienen un alto impacto para el adecuado al control de pérdidas económicas derivado de las ausencias permanentes de los trabajadores.

Teniendo en cuenta esta necesidad la cual es común a toda Compañía, las microempresas tienen ventaja en los análisis de ausentismo puesto que es fácil controlar al personal, las incapacidades son generalmente pocas y se puede hacer adecuado seguimiento a cada trabajador individualizando los eventos y si es requerido “capturar” casos de estabilidad laboral reforzada (aforados) identificando eventos en salud no solo de accidentalidad laboral y enfermedad laboral, también sirve para rastrear casos de enfermedades catastróficas que son de origen común. Además, el trabajador al sentir esa intervención directa percibe cercanía e interés por parte de la empresa y con esas acciones pequeñas se logra que el compromiso de la relación laboral sea mayor.

Esto es posible en organizaciones de menos de 10 trabajadores, donde es más fácil conocerse entre todos, pero conforme la planta de personal va creciendo, los números desbordan la capacidad de análisis y si le sumamos que las actividades sean dispersas, el personal sea más proclive a ausentarse frecuentemente y la forma de contratación sea diferente a el “término indefinido”, son variables que tienden a incrementar el ausentismo y si no se hace un adecuado seguimiento las pérdidas económicas pueden afectar el buen desempeño de cualquier organización.

Esta fue una experiencia nacida en un desafío. una empresa que tiene unas características que la exponen al ausentismo sin control: Se  tenían contratadas de forma simultánea más de 2000 personas, mano de obra no calificada (dentro del perfil a veces se recibe personas sin experiencia y únicamente con estudios terminados en secundaria), distribuidas en todo el territorio nacional y en centros de trabajo relativamente pequeños (de entre 10 y 150 trabajadores), los cuales están muy dispersos y es más fácil escapar a los controles de coordinaciones locales designadas.

Adicional, el conteo de incapacidades y ausencias no médicas (sanciones, inasistencias no justificadas, permisos legales, personales, calamidades, entre otras), llegaban a sumar 10,000 días perdidos en un año fácilmente sin intervención ni control.

Eso sin contar casos donde las enfermedades son graves y al no contar con conocimiento médico en el manejo de estos casos, convertían esos casos en “presentistas” (personas que, por el simple hecho de presentarse a laborar sin realizar actividad alguna, perciben su sueldo y con el argumento de estar enfermos se sienten intocables)

A pesar de contar con una estrategia organizada y un compromiso por parte de la compañía del personal a cargo (gerencia, seguridad y salud en el trabajo, recursos humanos y nómina) no solo bastaba establecer esos canales de comunicación, fue necesario desarrollar una herramienta sencilla, pero muy poderosa.

El desarrollo al principio fue rudimentario, pero conforme se fue mejorando, la calidad y la utilidad de la información obtenida fue suficiente para responder a las necesidades de la compañía.

Dicha herramienta, aunque de origen sencillo (basada en algoritmos básicos de formulación en programas de Microsoft office como Excel o Visual Basic), está al alcance de cualquiera, es fácil de manejar y resuelve fácilmente las necesidades más apremiantes de las ausencias. 

Es una actividad ardua desarrollada en una necesidad puntual de un cliente, pero que fue tomando forma y hoy, dos años después del inicio de su desarrollo, es capaz de clasificar Con 300 centros de costos, 300 cargos, 20.000 personas (activas o inactivas dentro de la compañía en lo corrido del año) y 18.000 eventos registrables de incapacidad (ausentismo médico y no médico) sin límite de días perdidos: 

  • Indicadores de Ley (Resolución 312 de 2019 y NTC 3701 de 1995)
  • Variables demográficas: (Género, Grupos de edad, duración en el cargo, días de la semana cuando inician las ausencias)
  • Análisis de tiempo perdido: horas hombre y días hombre (programados, perdidos y trabajados) exacto o proyectado según la disponibilidad de la organización.


Dr. Carlos Torres, Médico especialista en salud ocupacional


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